El éxito del contenido

¿Qué nos llama la atención? ¿Qué hace que un contenido resulte suficientemente atractivo como para interactuar con él? ¿Por qué tiene éxito una imagen, post, tweet o vídeo? En realidad, a la mayoría de nosotros no es que nos interesen las mismas cosas, pero sí son las mismas razones las que hacen que queramos interactuar con cierto contenido.

En la mayoría de los casos, aquello que más posibilidades tiene de que interactuemos con ello, genera una reacción emocional en nosotros (no importa que sea de desagrado, la pregunta es qué nos hace interactuar). También el que nos resulte curioso o sorprendente, al fin y al cabo, creemos que a otros también, ¿verdad? Que no nos consuma mucho tiempo procesarlo es algo positivo (ya hablamos del hecho de que TikTok ha tenido mucho éxito y una de las razones es que es contenido que se consume muy rápido). Y por supuesto, que pueda compartirse en varios medios, ya que cuanto más público objetivo, más posibilidades de que alguno interactúe con él.

Dicho esto, analicemos un caso concreto (no es mío, adjunto la fuente al pie del tweet) en el que se cumplen varios de estos requisitos:

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En el momento en el que se escribe éste artículo, el tweet tiene más de 8000 retweets, más de 1000 citaciones y más de 64000 "me gusta". No es ninguna tontería, teniendo en cuenta que la mayoría de nosotros no reunimos más de 20 "me gusta" por tweet (y la mayoría de las veces, menos). Analizándolo con atención, podemos fijarnos en qué características reúne de entre las que hemos mencionado previamente.

Primero: genera inmediatamente una respuesta emocional. Ternura en mi caso, alegría también y cierta sensación de ¿esperanza? El hecho de ver amabilidad gratuita es algo que personalmente me alegra y visto el éxito y el texto que acompaña el tweet, no soy el único.

Segundo: es realmente un tweet que a primera vista nos resulta sorprendente. No es un comportamiento que uno se esperaría de un roedor y ello nos hace prestar atención y hace que nos interesemos.

Tercero: El tweet breve nos llama, nos hace mirar la imagen, nos hace preguntarnos de qué va y como tampoco es excesivamente largo, lo leemos. No es el contenido más breve que se comparte, pero no es excesivamente largo tampoco, le dedicaremos menos de un minuto.

Cuarto: Es fácil de compartir en la mayoría de las redes sociales, incluso partiendo directamente del tweet si no se quiere ir a la propia noticia. Ya sea la propia imagen como alguien hablando del contenido, se puede compartir en grupos sociales como Whatsapp o Telegram. La imagen también puede ser subida a redes como Instagram o Facebook sin dificultad y en otras aplicaciones como TikTok, no debería resultar complicado realizar un vídeo corto de reacción a la noticia, con lo que resulta bastante fácil que llegue a una gran cantidad de gente. Llegó a salir en medios más convencionales incluso.

Así, se puede entender por qué ha tenido tanto éxito y alcance este tweet en concreto. Si queréis leer más de esta noticia, el artículo fue publicado en la revista Science y tenéis un enlace aquí.

Antes de abandonar el artículo, si quieres compartir conmigo tu opinión sobre el tema, deja un comentario. También sería muy interesante que compartieras un contenido que te haya resultado de interés en los comentarios.

¡Un saludo!